Hosting compartido: ¿Qué es y por qué escogerlo?

Si estás pensando en lanzar tu web a la red, debes saber que una de las principales decisiones que debes tomar es dónde alojar tu sitio web. Podrás elegir entre un hosting dedicado y un hosting compartido, y en este artículo te contamos en qué consiste el primero de ellos.

¿Te estás planteando contratar un hosting compartido para tu sitio web? ¡Te contamos todo sobre ello!

¿Qué es un hosting compartido?

Un hosting compartido o shared hosting es un tipo de alojamiento web, en el que los recursos del servidor se comparten entre diferentes usuarios y sitios web. Todos los dominios que están alojados en un hosting compartido tienen una parte de los recursos que el servidor ofrece.

La principal diferencia entre un hosting compartido y un hosting dedicado es que en éste el proyecto dispone de todos los recursos, mientras que, en el compartido, tanto el espacio como el disco se distribuyen entre todos los proyectos que utilizan el mismo hardware.

Ventajas y desventajas de tener un hosting compartido

Tener un hosting compartido supone una serie de ventajas para los usuarios que lo utilizan. Sin embargo, también hay algunos inconvenientes que pueden ser importantes para el usuario. Son los siguientes:

Ventajas

Entre las ventajas de un hosting compartido destaca el precio. Es el tipo de alojamiento web más económico, así que es la opción perfecta para las personas que están empezando y no pueden permitirse pagar un hosting dedicado.

Esto es porque el coste de un alojamiento web es elevado, pero en este caso se divide entre todos los proyectos que se alojen en dicho hosting.

Otra de las ventajas más importantes de los alojamientos web compartidos es el mantenimiento del mismo, del que se encarga el administrador del hosting.

En caso de los hostings dedicados, es el mismo gestor del sitio web el que se encarga del mantenimiento. Por eso, si lo que estás buscando es tener tiempo suficiente para desarrollar tu proyecto web, esta es la característica en la que tienes que fijarte.

El gestor del hosting compartido, además, ofrece soporte técnico para todos los sitios web alojados allí. Esta característica aporta mucha tranquilidad a los usuarios, ya que no tienen la necesidad de saber solucionar todos los problemas técnicos que puedan surgir.

Por último, el hosting compartido es un servicio escalable: si en el futuro, tu proyecto crece y decides alojarlo en un hosting dedicado, podrás hacer el cambio.

Desventajas

La principal desventaja de un hosting compartido es también su característica más destacable. Los recursos, al igual que el precio, se dividen entre todos los proyectos que se alojan en el mismo hosting. Por lo tanto, cada web tiene solo una parte proporcional de los recursos del servidor.

El hecho de compartir recursos puede desembocar en una carga lenta de los sitios web. Sobre todo, esto sucede cuando un proyecto crece y empieza a recibir mucho tráfico. Es el momento en el que el gestor del sitio web tiene que tomar la decisión de modificar su hosting compartido por uno dedicado.

Otra de las desventajas de los hostings compartidos frente al alojamiento dedicado es que no hay planes personalizados, sino que ofrecen características predefinidas. Para obtener un plan personalizado, que se adapte a las necesidades de cada sitio web, deberás ampliar tu hosting a uno dedicado.

Además, el hosting compartido también puede conllevar problemas de seguridad, ya que los hackers se ponen este tipo de objetivos para acometer contra más de un sitio web al mismo tiempo.

Sin duda, esta puede ser uno de los inconvenientes más problemáticos, puesto que la seguridad es uno de los aspectos que más importan a la hora de gestionar un sitio web.

¿Por qué elegir un hosting compartido?

El principal motivo por el que aconsejamos elegir un hosting compartido es el precio. Si tu proyecto es pequeño o estás empezando, es normal que no quieras pagar un dineral por el hosting, así que puedes elegir un hosting compartido que, en el futuro, podrás escalar en uno dedicado.

En caso de que quieras un hosting compartido con mayor velocidad de carga, puedes optar por un hosting SSD, que mejora también otros aspectos esenciales como el rendimiento de la web.

Además, si no tienes mucha idea sobre cómo realizar el mantenimiento, en un hosting compartido los administradores del mismo lo hacen por ti. ¡Es una gran ventaja que deberás tener en cuenta!

No obstante, te recomendamos aprender sobre mantenimiento de servidores, porque lo necesitarás si en algún momento quieres contratar un hosting dedicado.

En definitiva, el hosting compartido es una opción económica que ofrece muchos más servicios que un hosting gratuito. Pagar un precio justo por unas condiciones básicas del servidor es mejor que no pagar nada y tener un acceso muy limitado o que pagar por un servicio que no necesitas.

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Esperamos que este contenido te sirva de gran ayuda a la hora de adquirir tu plan de hosting compartido. Si consideras que puede ser de utilidad a más personas, no dudes en compartirlo en tus diferentes redes sociales.

Además, si quieres profundizar en esta temática u otras, te recomendamos visitar nuestro blog.